Apenas ahora escribo de una serie de eventos que pasaron la semana pasada, pero no me podía ir sin ponerlos al tanto, ya que esto que pasó es importante, por lo menos para mi.
El fin de semana pasado, me disponía como muchos domingos, a tomar clase de Yoga matutina con la maestra Shirley. Sin embargo, en esta época de lluvias y temporada baja, se ha estado cancelando a veces la clase por falta de quorum. Éste fué uno de esos casos, así que fuí a Elforoteo, dejé la Motomamí, y me les uní a Lety y al Inge a asistir a la protesta por la Reforma Judicial propuesta por AMLO y que tenía a medio México con los pelos de punta. Fuimos a la protesta, a la que sólo asistieron como 8 personas y un perro. Después de un rato nos regresamos, y oh sorpresa que nos habla Don Gus que le corramos a la casa de La Abuelita de Batman. En realidad eso de que nos habló fué un decir, nos gritó y luego colgó.
La Abuelita de Batman ya había estado al borde de colgar los tennis hace 3 meses, así que más rápido que una pelea del Canelo, nos fuimos a la Baticueva con la abuela. Cuando llegamos, supimos que mi abuela había sufrido una embolia y estaba casi sin respirar y sufrió un micro infarto. Lo que les dije de que habíamos llegado super rápido si era en serio, porque llegamos antes que la ambulancia. Cuando la ambulancia llegó, mi familia, le intenté hablar a mi hermano Josué. Como no contestaba, le hablé a Azul, con quien me había quedado de ver en Elforoteo, y ella me lo pasó. Así que Josué de manera agil como nadie lo creería, también llegó a la Baticueva. Subieron a la abuela a la Ambulancia. Y mientras todos se quedaron ahí y yo fuí el voluntario en subirme a ella. (A la ambulancia).
(Abro parentesis: Es la primera vez que me subía a una ambulancia. Yo iba en la parte de al frente, y fué divertido a pesar de lo angustioso de la situación. Pero sí desespera que mucha gente no se quita al oir la sirena. Ojala este blog sirva para crear un poco de consciencia.)
Fueron 4 angustiosos días en el hospital tomando turnos para estar cuidándola. Mi abuela perdió el habla y quedó inmovilizada de la mitad derecha de su cuerpo. Con la mano izquierda intentaba quitarse la sonda de alimentación y era una constante labor quedarse cuidándo a que no se la quitara. Mi abuela compartía habitación con otras 6 mujeres. 4 que fueron víctimas de Dengue, y una que se quejaba constantemente por un dolor intestinal. Una de las noches que me tocó hacer guardia, fué muy escalofriante ver, como si fuera película como el monitor cardiaco de la señora que se quejaba, empezó a pitar para avisar que la señora se nos iba. Todos los medicos y familiares hacían ruido como locos mientras yo le intentaba cantar a mi abuela para que se distrayera. Mi abuela es muy susceptible a eso de los fantasmas y así y pues no quería que se me asustara a pesar de que estuviera inconsciente.
Ahora la Abuelita de Batman está ya de regreso en la Baticueva. Pero sigue sin poder hablar y moverse bien. Aprovecho este blog para agradecer a todos los que se han preocupado o rezado por ella.
Y pues del otro tema del que empecé hablando, la reforma judicial, ya fué caso perdido, ya se aprobó. ¡Fin!
Israel Andalón 
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